← volver

ChatGTP en el aula: ¿Cómo aprender Analytics con Inteligencia Artificial?

Richard Weber dictando el curso “Módulo Interdisciplinario”

Richard Weber y Francisco Vilches.

Es un lunes por la tarde y en la sala D del edificio de Beauchef 851 se realiza una clase atípica e inusual. Se trata del curso “Módulo Interdisciplinario” impartido por Richard Weber, académico de Ingeniería Industrial, y Francisco Vilches, Ingeniero Civil Industrial Uchile y Magíster en Gestión de Operaciones (MGO), quienes enseñan a estudiantes plan común de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas (FCFM) a utilizar una de las herramientas más famosas y polémicas del último año: ChatGPT.

Este innovador curso tiene como objetivo que los estudiantes aprendan a través de su interacción con ChatGPT. Al principio de la clase y durante la misma, el equipo docente casi no interviene. “En cambio, proporcionamos material y formulamos preguntas para guiar el proceso de aprendizaje. Los estudiantes, entonces, se enfrentan solos al ChatGPT, donde deben hacer y responder preguntas y, a través de este proceso, adquirir  conocimiento necesario para su futuro académico y profesional”, explica Weber.

La génesis de este curso se remonta al año 2023, cuando las primeras noticias sobre el ChatGPT comenzaron a circular por los medios de comunicación. Fue entonces cuando Weber se dio cuenta del inmenso potencial esta herramienta tenía para transformar la enseñanza y la educación.

“La pregunta que surgió fue inevitable: ¿Cómo podríamos utilizar activa y proactivamente esta tecnología en la educación?”, relata Weber.

Agrega: “En ese momento, la mayoría de las universidades estaban considerando prohibir el ChatGPT. Personalmente, creo firmemente que ninguna herramienta debe ser prohibida; más bien debemos comprenderla, dominar su uso y reconocer sus limitaciones para emplearla de la mejor manera posible”, sostiene.

Este curso es el segundo en el cual el investigador experimenta con la inteligencia artificial. Durante el año 2023 realizó un otro curso experimental con ChatGPT, desarrollado en conjunto con el académico de la Escuela de Ingeniería y Ciencias de la U. de Chile  y exalumno de Ingeniería Industrial, Sergio Celis.

“En ambos casos, utilizamos inteligencia artificial, pero mientras en el primer curso pedimos a los estudiantes que crearan un producto utilizando esta tecnología, en este segundo curso nos enfocamos en utilizar el ChatGPT para el aprendizaje mismo de los estudiantes”, señala Celis.

Francisco Vilches, también exalumno y MGO, complementa: “El curso busca que los estudiantes utilicen tecnologías en su día a día, aprendan a buscar información de formas innovadoras y mejoren sus procesos, sin limitarse al uso del ChatGPT. De esta manera, integran lenguajes de programación de forma intuitiva y fomentan el pensamiento crítico”.

Javier Brito, estudiante de segundo año de ingeniería en plan común, cuenta que se interesó mucho por el curso, debido a que considera que la visión que tiene “es muy futurista”. “Al fin y al cabo, ir trabajando con códigos tanto de Python, ocupando ChatGPT, es algo que te da un poquito más de independencia como estudiante”, explica. Y agrega: “Es un curso mucho más didáctico e interactivo con los profesores y compañeros de proyecto”.

Por su parte, la estudiante de segundo año de ingeniería, Thais Soto, considera útil aprender a usar ChatGPT para desarrollarse en sus estudios.

“Es el primer curso donde podemos usar chatGPT y nos dicen cómo usarlo. Considero que aprender a usar estas herramientas como inteligencia artificial ahora es muy necesario, porque todo se hace con esto: las tareas, los trabajos, los informes. Entonces, aprender a usarlo es importante. Es una buena herramienta, pero no sabemos cómo utilizarla”, comenta.

Inteligencia Artificial y Universidad

“Este enfoque, aunque experimental y disruptivo, nos lleva a la esencia misma de la Universidad. En este curso cuestionamos las formas tradicionales de enseñar y aprendemos tanto nosotros como equipo docente como los propios estudiantes sobre estas nuevas herramientas como ChatGPT. La línea entre aprendizaje y enseñanza aquí se desdibuja; los estudiantes se enseñan a sí mismos a medida que avanzan en el curso y nosotros aprendemos de sus reacciones y progresos”, describe Weber.

Concluye: “No obstante, queda la incertidumbre sobre hasta qué punto este método conducirá al aprendizaje profundo que buscamos. Esta incógnita nos desafía a explorar y comprender mejor el potencial de esta herramienta, así como la capacidad de los estudiantes para aprender de manera autónoma”.

 


Texto y fotos: Marta Apablaza