01 de agosto de 2025 | Equipo de Vinculación | Departamento de Ingeniería Industrial, UCHILE
Alejandra Mizala
La Universidad de Chile presentó oficialmente ante la Comisión Nacional de Acreditación (CNA) el Informe de Muestra Intencionada, un nuevo insumo requerido en el marco de la acreditación institucional 2025. Este documento, entregado el pasado 11 de julio, busca evaluar cómo se expresan y se aplican el modelo educativo y las políticas institucionales en distintas carreras y programas de pre y postgrado de la universidad.
Este ejercicio marca un aseguramiento interno de la calidad, ya que analiza la transferencia y equivalencia del modelo educativo de la universidad a través de cuatro focos estratégicos: el diseño y actualización curricular; la enseñanza y el aprendizaje según perfil de egreso; el cuerpo académico; y los recursos operativos y económicos.
El informe incluye once programas académicos, diez de ellos fueron seleccionados aleatoriamente por la CNA: cinco de pregrado que corresponden a Ingeniería Forestal, Diseño, Geografía, Pedagogía en Educación Media en asignaturas Científico-Humanistas e Ingeniería Civil en Biotecnología; y cinco de postgrado, que son la especialidad en Neurología Pediátrica, el Magíster en Filosofía, el Doctorado en Derecho, el Doctorado en Administración de Negocios y el Doctorado en Bioquímica. A estos se sumó un programa adicional propuesto por la Universidad para fortalecer la representación del área de las ciencias sociales: la carrera de Trabajo Social.
“El informe de muestra intencionada da cuenta de la manera en que la Universidad plasma en sus distintas unidades su modelo educativo y principios orientadores, a nivel de sus programas de pre y postgrado”, señaló la Rectora Rosa Devés. La autoridad también valoró el compromiso institucional: “Un proceso de tan alta exigencia sólo puede abordarse participativamente, por lo que reconocemos el compromiso amplio de la comunidad que ha permitido abordarlo con éxito”.
La Prorrectora Alejandra Mizala, profesora del DII, quien ha liderado el proceso de acreditación institucional, agregó que este informe “da cuenta del compromiso sostenido de la Universidad de Chile con la calidad y equidad en la formación a través de políticas, normativas y procesos que aseguran estándares de excelencia en todas sus carreras y programas”. Además, agradeció el trabajo de las unidades académicas para garantizar trayectorias formativas inclusivas, con foco en la actualización curricular, el fortalecimiento docente y el acompañamiento integral al estudiantado.
El proceso de construcción del informe comenzó a principios de 2024, con una primera ronda de visitas de la Vicerrectoría de Asuntos Académicos (VAA) a todas las facultades e institutos. En estas reuniones se presentó el propósito de la muestra intencionada y se solicitaron formularios detallados de autoevaluación de más de 300 programas de pre y postgrado. Esta gran base de datos permitió a la VAA sistematizar insumos, elaborar minutas y entregar retroalimentación específica a las unidades, en un segundo ciclo de trabajo institucional desarrollado desde abril en adelante.
El Departamento de Ingeniería Industrial participó en las instancias de preparación y revisión institucional lideradas por la VAA, fortaleciendo así sus propias prácticas de gestión curricular, evaluación interna y docencia basada en evidencia.
Para el Vicerrector de Asuntos Académicos, Claudio Pastenes, el proceso ha tenido implicancias institucionales profundas. Por un lado, permitió que los equipos docentes reflexionaran sobre la coherencia entre sus programas y las políticas y normativas institucionales. Por otro, generó una base de datos sistematizada y representativa, que permitirá orientar mejoras futuras: “Esta labor dio inicio a un trabajo transversal de internalización de las políticas y normativas necesarias en las innovaciones curriculares, el trabajo proactivo hacia mejores resultados del proceso de enseñanza y aprendizaje, al perfeccionamiento docente y a la mejor decisión en cuanto a la orientación de recursos en la implementación de la docencia”.
En este sentido, el informe no sólo sirve para cumplir con los requerimientos de la CNA, sino que se transforma en una herramienta de mejora continua que fortalecerá los procesos académicos en todas las unidades. Tal como destacó la prorrectora Mizala, “esta muestra intencionada muestra la solidez del sistema interno de aseguramiento de la calidad, proyectando a la Universidad como referente nacional en educación superior, con sentido público y compromiso con el país”.
Proyección y próximos pasos
El trabajo realizado hasta ahora será complementado con una fase de socialización del informe de autoevaluación a través de visitas de la Rectora y la Prorrectora a las distintas unidades académicas. Luego vendrá la visita del comité de pares evaluadores, y posteriormente, la resolución de acreditación institucional por parte de la CNA.
Para el DII y el resto de las unidades, este proceso fortalece las condiciones para consolidar trayectorias académicas más coherentes, inclusivas y exigentes, donde la mejora continua sea parte del quehacer cotidiano. A su vez, abre un espacio valioso para alinear la innovación docente con los principios del modelo educativo institucional, asegurando así un impacto duradero tanto en los estudiantes como en la sociedad.