A tono con los tiempos de digitalización que corren, Ingeniería Industrial está embarcado hoy en un programa estratégico para sus cuatro magísteres, sus cuatro MBA’s y sus diplomados y cursos de especialización. El encargado de liderar este ambicioso plan es Máximo Bosch, Ingeniero Civil Industrial de la Universidad de Chile y Master of Science de la Universidad de Pennsylvania, Estados Unidos, quien se reincorporó al departamento en mayo como Profesor Asociado. Desde entonces ha estado trabajando en un diagnóstico de lo que hay desplegando, en paralelo, un trabajo conjunto con la Universidad y otras unidades de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas (FCFM).
Lo anterior, con un fin: “Cómo usamos la tecnología para potenciar nuestros programas; la tecnología se está transformando en el motor del tan esperado cambio metodológico del proceso enseñanza/aprendizaje”, resume Bosch destacado que somos parte de una Facultad de Ingeniería y que la tecnología debe tener un papel protagónico en la enseñanza.
“Me ha ido bien”, adelanta agregando que hay una buena base para partir.
-¿Qué acciones planea implementar en el marco del plan?
-El mundo está digitalizando sus procesos y nosotros tenemos que hacernos cargo de la digitalización de nuestro proceso de enseñanza-aprendizaje. En esta línea queremos diseñar algunos cursos e-learning, no solo para nuestra educación de postgrado, sino que también para el pregrado. En el mundo hay un cambio muy grande con la tecnología y las nuevas capacidades, y debemos tener un pie en ella.
Bajo esta premisa, Bosch trabaja con los directores de los postítulos y postgrados del departamento, así como con el director de docencia.
“Estamos viendo cómo potenciamos el logro de los objetivos de nuestros cursos, a través de la tecnología”, circunscribe señalando que en este camino tendrán que mirar cada curso en su individualidad y ver cómo la tecnología maximiza el aprendizaje, ya sea que se impartan 100% online o solo una parte de ellos.
Proyecta: “Aquí estamos hablando del 100% de los cursos. A mediano plazo, ninguno se podrá escabullir de mirar cómo incorpora la tecnología”.
-Y aquí entra el plan que se está trabajando.
-Exacto, la idea es ir viendo las oportunidades que hay. Se trata de una tarea permanente porque la tecnología va cambiando y tendremos que ver si las nuevas tecnologías que van surgiendo nos ayudan para potenciar lo que hacemos en cada curso.
Concluye: “Creo que la mayoría de los programas tradicionales son muy ineficientes en el uso del tiempo del alumno. Hacer que se desplacen tres horas para que estén el mismo tiempo en una sala es una pérdida de tiempo. Esos son síntomas de que la educación tradicional siempre ha necesitado cambios y hoy existen herramientas para responder a ellos. Por otra parte, también es importante entender que la vinculación con el medio se hace a través de la Educación Ejecutiva, con plazos acotados”.