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En su presentación, Meller indicó que aunque la pregunta inicial del estudio apuntaba al impacto de esta industria sobre las regiones mineras, su enfoque se amplió a nivel país, dada la importancia del cobre en sus indicadores macroeconómicos. En este marco, el académico y autor del libro
“La viga maestra y el sueldo de Chile” (lanzado recientemente) aseguró que el cobre ha traído distintos beneficios como la acumulación de divisas , así como significativos ingresos al fisco a través de tributación y utilidades de Codelco; lo que, a su vez, permite una menor tributación por parte de individuos y empresas. Lo anterior, dijo, ha posibilitado inversiones públicas, de las cuales no necesariamente se benefician las regiones mineras que exhiben altos indicadores económicos y bajos indicadores de calidad de vida.
“¿Qué le deja el cobre a Chile?, preguntó Meller a los estudiantes. “Divisas y eso nos permite importar lo que importamos, además de tener ingresos para el fisco”, respondió.
“¿Cuánto le aporta el cobre al fisco?”, se preguntó el académico a continuación, a lo que respondio: “20% de los ingresos”.
“Gracias al cobre todos los chilenos pagamos menos impuestos”, agregó.
Respecto al pesimismo sobre el futuro del cobre, Meller apuntó que no creía en los ‘súper ciclos’ e indicó que hay que mirarlo en la perspectiva del cambio en la estructura productiva y de consumo a nivel mundial producto de la fuerte entrada de Asia y, en particular de la población de China, desde los años ’90. Pese a esto, advirtió que el volumen de aumento de producción y del precio del cobre no se repetirán, y que es responsabilidad de las empresas y del gobierno aprovechar el cobre para convertir a Chile en un país desarrollado.
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